Mi nombre es Walter Pinter, soy periodista de la U. de Chile y publiqué un libro sobre la industria del salmón en la Décima Región y su relación con la educación técnico profesional. Sin embargo, el tema no se agota en eso, pues tiene relación con el impacto en la superación de la pobreza y el desarrollo regional. Especificamente, el texto menciona al Nobel de Economía de 1998, Amayrta Sen, quien a su vez elogia al actual ganador del Nobel de la especialidad. Se trata de economistas que estudian el tema del desarrollo en las actuales circunstancias, alejándose de opciones neoliberales estrechas como de análisis desarrollistas que postulan que estamos igual que hace 500 años.

Conceptualizo aspectos de la educación -que es el tema central del estudio-  como base para superar la pobreza y el descontento social de la población en general. También trato el tema de los desequilíbrios producidos por el excesivo centralismo ya que focalizo en estudios mesoeconómicos, de ciudades fundamentamente regionales, y la polarización que genera para el emprendimiento y el deseado desarrollo. Desde luego, aquí se pone énfasis en los problemas actuales del desarrollo de Chile, los errores cometidos por la rápida privatización de universidades públicas y el abandono de la educación técnica y de la planificación regional en favor de un centralismo que asfixia, por ejemplo con el transantiago, es decir, empresas públicas financiando empresas privadas ineficientes (buses capitalinos), así como un estado financiando educación privada de mala calidad que todos pagamos con nuestros impuestos (incluso aquel que gana menos que el mínimo, que paga impuestos con el que se financia la locomoción pública que no puede usar, y debe ir al trabajo en bicicleta). Además, indirectamnte tematiza el problema de la cantidd de jóvenes que egresan de la secundaria que ni trabajan ni estudian, porque la educación recibida no sirve o no tienen dinero para continuar su formación y hoy forman un pequeño ejército de vándalos frustrados y sin límites, en que los convirtió el sistema.

Buena parte de los impuestos que pagan los habitantes de regiones van para subsidiar a la capital, para esas prácticas que son pésimas políticas públicas. Destaco en el texto los análisis del departamento de Ingenieria Industrial de la U. de Chile y de investigadores de la Universidad Alberto Hurtado, entre las fuentes principales de análisis nacional. También a los gestores de la planificación regional como es el caso de Elías Almeyda, un maulino pionero en esta área.

Hago un análisis de las limitaciones y beneficios del modelo aplicado y sus desafíos futuros.

Walter Pinter