Regional

El plebiscito en la Región de Valparaíso: Ghettización de la élite, profundo desencanto de zonas rurales y nuevo electorado urbano

El Observatorio de Participación Social y Territorio, conformado por académicos de la Universidad de Playa Ancha, publicó el pasado 5 de noviembre un estudio titulado “Territorios Constituyentes: Procesos y tendencias en la distribución territorial del voto en la Región de Valparaíso”. La investigación resume y analiza la intención y distribución de voto en la región, obteniendo relevantes conclusiones. Pablo Saravia, sociólogo y uno de los autores de la investigación, explica que “los medios de comunicación hacen una lectura generalmente muy centralizada en lo que pasa en la Región Metropolitana. Por lo tanto, comprender el comportamiento electoral de una región tan importante como Valparaíso, desde Valparaíso, era una cuestión muy necesaria, ya que tampoco estaba siendo abordada por los grandes centros de investigación electoral”.

LOS BALUARTES DEL RECHAZO: LOS GHETTOS DE LA ÉLITE

El estudio en cuestión señala que “las comunas que concentraron los mayores porcentajes de esta opción fueron Santo Domingo (39%), Concón (35%), Zapallar (33%) y Algarrobo (29%) Todas estas son comunas costeras y de un perfil socioeconómico medio-alto.En estas comunas también se registraron los mayores niveles de participación en la región, alcanzado cifras superiores al promedio regional (53%) y nacional (50%), concentrando niveles de participación superiores al 60% de su padrón electoral. Sin embargo, al comparar estos niveles de participación con la votación presidencial del año 2017, esta fue mucho menor, a excepción del caso de Concón”.

Respecto a esto, Nelson Carroza, sociólogo y principal autor del estudio publicado, explica que “las comunas donde hubo mayor disminución del padrón electoral, comparando con elecciones anteriores, fue en las comunas coincidentemente de perfil socioeconómico medio alto y que mayoritariamente se vincularon al rechazo. Aun así, su nivel de participación sigue siendo muy alto”.

La investigación indica que “la distribución territorial del voto a favor del rechazo en la Región de Valparaíso, a diferencia del caso del Gran Santiago, no posee una distribución concentrada u homogénea, por el contrario, su distribución es fragmentada territorialmente, en comunas no contiguas, pertenecientes a distintos subsistemas metropolitanos de la Región.” Según el estudio, la dispersión no fue homogénea, sino que hubo lugares en los cuales este grupo electoral concentró su presencia. Como es el caso de Reñaca Bajo, circunscripción electoral que pertenece a la comuna de Viña del Mar, en donde la preferencia por el rechazo alcanzó el 60,3% y se registró un nivel de participación del 71,3%, la mayor cifra en la región.

Elizabeth Zenteno.

Sobre el comportamiento de estas cuatro comunas, Elizabeth Zenteno, socióloga y Coordinadora del Observatorio afirma que “otra cosa que tienen en común, es que se encuentran en buena parte auto segregadas. Tienen estos procesos de separación de la ciudad, y así mismo se separan de la sociedad. Además, hay que enfatizar que en estas comunas está la mayor renta de la región.”

Por otra parte, Pablo Saravia dice que es difícil definir un perfil de los votantes de estas cuatro comunas, pero se puede hipotetizar que “son sectores que de alguna forma reproducen la segregación espacial, social y política, propia de un país profundamente desigual, como el Chile de hoy. Son sectores que pueden estar asociados a una especie de élite regional y probablemente, por el hecho de ser comunas costeras y residencias de segunda vivienda, tengan relación con la élite de Santiago que tenga aquí su local de votación.”

EL PROFUNDO DESENCANTO DE LAS ZONAS RURALES

El estudio del Observatorio señala que los municipios que presentan las mayores preferencias por el Apruebo se concentran en el sector norte e interior de la Región de Valparaíso. Entre ellos destaca el caso de Petorca, que concentra el 90,05% de los votos, siendo una de las más altas a nivel nacional. El estudio también destaca a Llay Llay, Nogales, Cabildo, Putaendo, Calera, La Ligua, Calle Larga, Hijuelas y Santa María, todas comunas interiores del sector norte de la región.

Aunque, por otro lado, otras comunas insulares o dispersas territorialmente, igualmente registran una importante concentración del Apruebo, como es el caso de San Antonio, Juan Fernández, Isla de Pascua y Puchuncaví. Además, cabe mencionar que en las comunas en las que el Apruebo tuvo mayor concentración, también hubo menor participación. Ese es el caso de Isla de Pascua, Juan Fernández, Olmué, Hijuelas, Catemu y Petorca. “El caso de Petorca es bien interesante, si bien es donde el Apruebo logra mayor concentración, su porcentaje de participación comunal resulta ser relativamente bajo, incluso está por debajo del nivel regional. Pero si consideras la participación de años anteriores, se puede observar un aumento moderado del electorado” indica Nelson Carroza.

Nelson Carroza y Pablo Saravia.

A pesar de la baja participación, en todas las comunas en las que el Apruebo logró mayor presencia, hubo un aumento de la participación respecto a años anteriores. Pero en el caso de las comunas de interior, en las que la participación ha sido históricamente baja, su aumento fue moderado. Pablo Saravia, por su parte, reflexiona en que “hay muchos sectores rurales en el interior, que están sufriendo y han sufrido un aislamiento permanente. Entonces, esta desidia o carencia de participación puede deberse a la sensación subjetiva, social y política de la no inclusión. Por lo tanto, puede ser que ningún proceso, por muy histórico que sea, logre captar la atención de estos sectores porque históricamente se han sentido excluidos”.

En relación a esto, el estudio enfatiza en que la Región de Valparaíso concentra la mayor cantidad de conflictos socioambientales en Chile. De hecho, es en estas comunas en las que se han desplegado importantes luchas y resistencias contra el modelo extractivista. Destaca el caso de Petorca con el acceso y usurpación del agua, de Puchuncaví como zona de sacrificio y las zonas del interior con el monocultivo extensivo. Estos dos elementos, logran explicar por qué en estas zonas podemos hallar una tasa de participación tan baja, y a la vez un aplastante triunfo del Apruebo.

Pablo Saravia sigue explicando que “estos territorios han sido históricamente relegados y puestos al servicio de este modelo de desarrollo, que se sostiene en la idea de convertir a estas comunidades en zonas de sacrificio para el beneficio de la nación. Para estos territorios, que sufren permanente y sistemáticamente las crisis medioambientales y sociopolíticas que afectan directamente el bienestar de sus familias y su entorno inmediato, ese modelo de desarrollo está agotado. Esa política pública que ha fomentado el agronegocio, en desmedro del bienestar de los territorios y sus comunidades, han causado la pérdida de autonomía en las pequeñas unidades agrícolas y ganaderas de la zona. Por lo tanto, esa política pública sumado al gran modelo del desarrollo y del progreso, hacen que estos territorios reaccionen ya no estén dispuestos a seguir apoyando este sistema, y a través de este voto muestran su rechazo, muestran esta necesidad de cambio y piden a gritos por procesos de transformación.”

EL NUEVO ELECTORADO URBANO

En todas las comunas de la Región de Valparaíso donde ganó el apruebo hubo aumento de la participación. Sobre esto, Nelson Carroza extrapola que “la lógica del apruebo esconde profundos procesos de nuevas participaciones y nuevas dimensiones de la participación”.  En los casos de aumento de la participación, destaca el caso de Llay Llay, comuna que tuvo un aumento del 16% respecto a la elección del año 2017. También resaltan los casos de Isla de Pascua y Juan Fernández, ambas comunas en donde hubo un bajo porcentaje de participación comparado con otras comunas de la región, pero donde creció la participación respecto a la votación anterior en cerca de un 12 y 11% respectivamente.

En todas las demás comunas que son cabeceras provinciales, se registraron niveles de crecimiento por sobre el 5% del padrón electoral. “Hay un perfil y un patrón que se vincula a las comunas metropolitanas o de sistemas subsistemas metropolitanos. Estamos hablando de Valparaíso, San Antonio, Viña del Mar, Calera, Quilpué, Los Andes y Villa Alemana. En éstas hubo un aumento significativo y constante de la participación, mucho más que en comunas del interior”, explica Nelson. Además, el investigador indica que “existen dos tipologías de estos nuevos votantes. Por un lado, el votante que está vinculado a áreas urbanas o subsistemas metropolitanos, que viven un desarrollo que nunca llegó y un profundo descontento con el sistema imperante. Y por otro lado, el votante del interior, que es donde se han manifestado y evidenciado las mayores contradicciones y las mayores resistencias al modelo.”

“Esta población que vota por primera vez, o que no había participado en elecciones anteriores, es un grupo difícil de catalogar, ya que no hay registro histórico sobre su comportamiento electoral. Pero uno pude prever que se trata de un grupo que suscribe a las consignas del movimiento social activado tras la revuelta de octubre. Una de estas demandas tiene mucho que ver con el descredito general de la clase política. Por lo tanto, este nuevo grupo electoral puede haberse hecho parte desde la convicción de que estaba votando en un proceso que va a transformar o abrir la posibilidad de decisión y participación a sectores no cooptados ni vinculados con los intereses de los partidos políticos”, señala Pablo Saravia.

Como cierre de esta investigación, Elizabeth Zenteno, coordinadora del Observatorio, reflexiona que “estamos conscientes del rol que tenemos como académicos y académicas dentro de la región. Sabemos que debemos posicionarnos frente al contexto político que estamos viviendo. Se ha querido contribuir al desarrollo desde nuestro saber. Creemos que este estudio era necesario para contribuir en un panorama político más claro. Sabemos que este trabajo será un aporte respecto a cómo pensar la participación en las comunidades y territorios, reconociendo que la participación electoral no es la única forma de participación”.

Categorías:Regional

Etiquetado como:,

1 respuesta »

Deja un comentario