Mediante comunicado, el movimiento Un Parque para Las Salinas expresó su enérgico rechazo al proyecto de “parque” impulsado por la empresa COPEC a través de un concurso que, según denuncia la agrupación, se trataría, más bien, de un intento de «Greenwashing o ecolavado de imagen para cambiar el foco de la discusión de los impactos que generará en la salud de la población y turistas su remediación bacteriológica con finalidad de edificar un megaproyecto inmobiliario”.

Comunicado del Movimiento Un Parque para Las Salinas sobre Concurso Parque Plaza Urbano Las Salinas (PULS) de COPEC.

Como movimiento Un Parque para Las Salinas, manifestamos un profundo rechazo al Concurso Parque Urbano Las Salinas (PULS) de COPEC.

Este rechazo es debido al intento de confundir a la opinión pública por parte de la empresa. Lo que la inmobiliaria de COPEC está proponiendo como parque corresponde a las dimensiones de una plaza de 1.8 hectáreas; según la Mesa de Áreas Verdes del Centro de Políticas Públicas de la Universidad Católica, para que se considere un parque tiene que tener más de 2 hectáreas.

Además que este concurso no aborda ni hace referencia en ninguna parte a las condiciones actuales de riesgo que presenta el terreno y que está graduado como Área de Riesgo (AR) en el Plan Regulador Comunal (PRC), debido a la presencia contaminación cancerígena y mutágenos en concentraciones de alto riesgo.

La solicitud de la comunidad organizada de destinar el paño Las Salinas como un gran parque para la ciudad, abarca las 18 hectáreas del paño incluyendo el paño Norte, paño Sur y toda la ladera. De esta manera evitar remover las tierras contaminadas como es necesario para el saneamiento de uso residencial del predio como lo propone la inmobiliaria.

Proponemos un saneamiento IN SITU, a través de la fitorremediación (Parque) para las capas superficiales y un proceso poco invasivo y prolongado en el tiempo para las capas profundas.

La empresa a través de este concurso está realizando Greenwashing o ecolavado de imagen para cambiar el foco de la discusión de los impactos que generará en la salud de la población y turistas, su remediación bacteriológica con finalidad de edificar un megaproyecto inmobiliario.

Hacemos el llamado al jurado del concurso: Juan Grimm, Sergio Baeriswyl, Macarena Ruiz, Gonzalo Tellería, Joaquín Bustamante, Claudia Woywood, David Arce Tapia, Luis Álvarez, Maurizio Angelini, María Elena Ducci y a las oficinas de arquitectura Urbana E&D – Teodoro Fernández Arquitectos, Habitat Sustentable María Loreto Valenzuela, Mobil, Archiplan, a no ser parte ni cómplices de este atentado ambiental-urbano contra los y las habitantes de Viña del Mar.