La instalación de la Convención Constitucional nos ha regalado la imagen de un futuro posible para Chile, plurinacional, inclusivo, respetuoso de los derechos fundamentales de su pueblo y del medio ambiente.
Y junto al trabajo de esos 155 convencionales se requerirá del trabajo y compromiso de nuevas parlamentarias y parlamentarios que profundicen y elaboren el camino para nuestra nueva Constitución y yo anhelo ser parte de ese desafío.
Luego de lo vivido a partir del emblemático 18 de octubre, con manifestaciones en la calle y redes sociales, quedó en evidencia la alarmante distancia entre las esferas políticas y la ciudadanía y con ello una profunda crisis de confianza, pérdida de las expectativas y pérdida de la esperanza en nuestros representantes. Si se pierde la esperanza, perdemos el sentido de cualquier proyecto social humanista; por esto estoy convencida que para recuperarla, no sólo debemos marchar, sino también participar de los espacios democráticos y de votar en los procesos eleccionarios.
Alguien me dijo que después de todo lo que hemos pasado, no tenemos derecho al pesimismo; que debemos levantar la frente y recuperar el diálogo social. Que debemos volver a parlamentar.
Ese momento es ahora, y quiero poner a disposición de las ciudadanas y ciudadanos, desde Concón a Santo Domingo, todo mi trabajo, compromiso y convicción para representar todos esos anhelos de respuestas sociales y políticas para el nuevo Chile.
Por mi formación y por mis experiencias quiero ir mucho más allá de lo que establecen las leyes. A lo largo de todo este viaje he aprendido que lo más importante son las relaciones que forjamos con otras personas y que las normas que regulan estas relaciones deben fundamentarse en el respeto, el compromiso y el diálogo.
Susana Calderón Romero
CEO Espacio LOF
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