Carta a la redacción.

Con una amplia mayoría en el Congreso y el apoyo del Gobierno, finalmente el Senado aprobó el proyecto de ley que fija como feriado móvil el Día de los Pueblos Originarios, por lo que el próximo lunes 21 de junio será día festivo.

Sin embargo, durante el debate legislativo, poco se dijo respecto a los efectos colaterales que podría traer el nuevo feriado sobre las horas médicas y cirugías pactadas durante esta semana, así como tampoco se habló de las audiencias fijadas por la justicia para el próximo lunes.

Es por esto que personalmente encuentro que tomar esta decisión tan apresurada no hace más que traer consigo una preocupación a todas las personas que contaban con ese día para una urgencia, hora médica o audiencia.

La legislación apresurada provoca un daño muy grande, tanto desde la perspectiva de la salud y judicial. Una vez más somos víctimas de estas leyes precipitadas. ¿Por qué se sigue permitiendo la implementación de estas?

Elisa Aguirre Delaveau
Estudiante