La dilación de la decisión del Concejo Municipal respecto de los coches victoria de la Ciudad Jardín y la paralización de actividades por coronavirus ha puesto en graves aprietos económicos a trabajadores que por años se han desempeñado en este rubro.

“Estamos muy aproblemados porque el municipio de Viña del Mar no está cumpliendo con su palabra con respeto a la finalización de la actividad de los coches victoria”, señaló Bárbara Crichton, vocera de Una Victoria para Viña, colectivo que ha liderado la lucha por detener la circulación de estos carros a tracción animal.

De acuerdo a lo acordado por la autoridad comunal, luego del aplastante triunfo de la opción “No” a la pregunta “¿Está usted de acuerdo con que continúen los coches victoria circulando por las calles de Viña del Mar”, que se incluyó en la papeleta de la consulta ciudadana municipal del 15 de diciembre, el 30 de marzo era el último día para las victorias. Sin embargo, ha pasado el tiempo y el municipio aún no resuelve qué hacer con los caballos, ni la situación de los cocheros y los carros, indicaron desde el colectivo.

Fuentes cercanas a la Mesa Técnica, creada por decreto para proponer al Concejo Municipal alternativas de solución, señalaron que ya habían concluido su labor, pero que el Concejo ha postergado más de tres veces poner en tabla el tema. No obstante, según lo informado hoy, podría ser incorporado a la tabla de la proxima sesión.

“Esperamos que haya un compromiso de los concejales para avanzar en lo ya comprometido y conforme lo que la ciudadanía marcó en la consulta, y también en los acuerdos que el municipio tomó con los actores del rubro”, comentó Hernán Madariaga, vecino del sector y colaborador del colectivo.

“Estamos preocupados por la situación que viven los caballos ya que, producto del coronavirus, los cocheros no han trabajado y, por lo tanto, no tienen ingresos directos para la mantención de más de 30 equinos. Esperamos que el Concejo pueda resolver a la brevedad este tema y no lo siga postergando ya que fue una determinación ciudadana a partir de una consulta donde más de 52.000 viñamarinos votaron por el término de esta actividad”, enfatizó Bárbara Crichton.

La Municipalidad de Viña del Mar informó que a partir del 31 de marzo no se renovarían las patentes para estos coches, poniendo fin a su circulación por las calles de la Ciudad Jardín.

El problema, agregó la vocera, es que “los cocheros, debido a la crisis sanitaria por coronavirus, en este momento están paralizados, lo que es muy grave y peligroso porque pueden que siga así hasta quizás cuándo y tememos por el futuro de estos caballos. Si el municipio no se pronuncia a tiempo, terminarán probablemente siendo vendidos a mataderos, a una feria o quizás dónde”.